Se acerca el 28 de Mayo, y por ende, unas jornadas dónde se espera que haya un aumento del porcentaje de intención de voto con el fin de cambiar la rutina de muchos municipios
Decía Einstein – que algo sabía el hombre – que no se pueden esperar resultados diferentes haciendo siempre lo mismo; llega el 28 de Mayo, una fecha que parecía lejana, pero que en muchos casos se ha acercado peligrosamente, como si de una leona hambrienta se tratara en medio de la sabana de la vida política. Y es que, muchos comienzan a ver peligrar su “carguito”, y la cosa se empieza a complicar en caso de no resultar elegidos o reelegidos.
Y es que cuando las cosas no se hacen bien, al final el pueblo es soberano, y salvo raras ocasiones dónde parece que se perdona todo, lo normal es que hayan cambios en los gobiernos que no han aprobado con nota en su gestión de estos últimos años. Muchos municipios han permanecido en el estatuismo político, viéndolas venir mientras el pueblo las pasaba canutas, y una vez ha pasado el Covid-19 – si es que realmente ha pasado – comenzaron a mover la máquina de asfaltado para que pareciera que se hacían cosas, pero realmente lo que se estaba haciendo era lavando la cara de una gestión que ha estado muy lejos de las necesidades del pueblo.
Ha sido muy triste ver como negocios han cerrado porque nadie les ayudaba, porque la inversión del gobierno estatal dependía de la limpieza en cuanto a deudas con seguridad social y hacienda pública, lo cuál impedía a un altísimo porcentaje de empresarios recibir un sólo céntimo de dicha inversión. Ha sido muy triste contemplar como muchos ayuntamiento preferían quedarse en casa como cualquier hijo de vecino, mientras su cuenta bancaria se llenaba mensualmente por hacer “nada”, pero además, literal, más allá de sacar a su perrito tres o cuatro veces al día para disfrutar de la luz del sol.
Sin embargo, lo triste es que justo en el mejor momento para invertir, cuando no hay límite, cuando se puede utilizar un remanente de tesorería que ojalá muchas otras corporaciones anteriores hubieran pillado, en muchísimos casos, se ha preferido no hacer nada. Ojo, no todos, porque ha habido Ayuntamientos que no han parado de gestionar y de invertir, y los resultados se han visto desde el minuto uno, pero lamentablemente el porcentaje ha sido ínfimo.
Por tanto, con el 28 de Mayo a la vuelta de la esquina, el vecino debe valorar, y reflexionar sobre si se le han gestionado bien los recursos de su municipio, porque no todo es asfalto, esto va mucho más allá… Y es que un Ayuntamiento tiene como función principal estar del lado del vecino, y en ninguno de los casos convertirse en un enemigo de ellos, pues no tiene mucha lógica tener al león dentro del gallinero.
Así las cosas, habrá determinadas ciudades o municipios dónde la noche del recuento va a estar divertida, pues los resultados pueden variar susceptiblemente en cuestión de minutos, y dónde cualquier cosa puede pasar… Y cuando decimos “cualquier cosa”, es literal, CUALQUIER COSA.
