48 años atrás, en España se vivía una dictadura que nos privaba de muchos derechos fundamentales. Hoy en día, gozamos de una libertad impensable, fruto de la lucha de muchos guerreros y guerreras
El 28 de Mayo es una de esas fechas en las que sólo deberías tener una prioridad, ir a votar. Por quién quieras, pero ve a depositar tu voto, porque de no hacerlo estarás faltando el respeto a la memoria de todos esos hombres y mujeres que se partieron la cara para que nosotros tengamos hoy todos los derechos que tenemos, que no son pocos.
Se sabe que nuestra sociedad actual no tiene memoria, y se sabe que además es tremendamente caprichosa, pues lo queremos todo “per sé”, pero no somos capaces de mover un dedo para que nuestras condiciones mejoren. Mientras que en Francia salen a la calle día sí y día también para protestar por la subida de la edad de jubilación, o por el precio del combustible, España sigue siendo el país dónde lo más cerca que estamos de luchar por nuestros derechos es poner un tweet.
¿Qué pensarían nuestros abuelos, que lucharon en la Guerra civil, que se vieron obligados a emigrar o a vivir en base a un carnet de racionamiento, si viéramos que nos hemos convertido en una sociedad vaga y sin agallas? ¿Qué pensarían quienes se enfrentaron a un régimen franquista, y quienes sentaron las bases de nuestra democracia y de nuestro estado de bienestar?
El 28 de Mayo hay que ir a votar. Tenemos la suerte de hacerlo por quien quieras, pues hay muchas opciones en todos los estamentos públicos, pero no podemos quedarnos en casa. Se tarda nada depositar el voto, y luego si quieres aprovecha el día como quieran y con quien quieras.
El 28 de Mayo es una fecha que deberías marcar en rojo, y que debería sentar las bases de un futuro prometedor para este país, con gente implicada y deseosa de cambiar la historia actual y el futuro próximo.
El 28 de Mayo, es el día de aquellos que valoramos nuestras libertades y derechos, y que lucharemos para que nuestros hijos tengan una vida plena, pero sabedores de que nuestros derechos son fundamentales, pero nuestros obligaciones como ciudadanos marcarán la fortaleza de nuestro pueblo.